El agua es un elemento esencial en todas las culturas y tradiciones espirituales. Posee un poder profundo y versátil. En el ámbito esotérico y kabbalístico, el agua no solo limpia y purifica, sino que también actúa como un canal para la manifestación y la protección. Este elemento es una excelente restaurador del equilibrio energético. Aquí te contamos algunos usos muy útiles.

• Baños de Descarga:

Prepara un baño con sal marina y algunas hierbas purificadoras como romero, lavanda o ruda (asegurate de no tener alergias). Sumergirte en este baño durante 20 minutos te ayudará a renovar tu aura. Mientras reposas, recitá 3 veces seguidas: “Bendito eres Tú, Adonai, que transformas el caos en orden y la oscuridad en luz.“

• Lavado de Manos:

Lavá tus manos con agua o con una infusión de hierbas purificadoras para limpiar tu energía personal después de situaciones cargadas. Usa la siguiente frase para que tenga más fuerza: “El agua fluye y purifica, como la Luz del Creador que nos envuelve en su misericordia.“

• Ana Becoaj con Agua:

Recitá el Ana Becoaj mientras sostenés un vaso con agua para cargarlo con energía divina. Al beberla, estarás incorporando la Luz del Creador a tu ser. Mientras realizas este ritual, usa la frase: “Que la Luz del Creador fluya a través de esta agua, elevando mi alma y transformando mi ser.“

El agua, con su capacidad para limpiar, proteger, manifestar y conectar, es una herramienta invaluable en tu práctica espiritual. Usándola con sabiduría y respeto, podés potenciar tu conexión con las fuerzas divinas y mantener un equilibrio armonioso en tu vida.